En los últimos tiempos estamos viviendo un incremento constante en la demanda de instalación de SATE en Madrid y en otras zonas como solución constructiva para fachadas. En esta entrada vamos a repasar el porqué del aumento en su demanda, en que consiste este sistema y repasaremos los distintos tipos que podemos encontrar en el mercado.
El SATE nace con el fin de aportar una solución constructiva sencilla y viable técnica y económicamente a la rehabilitación energética de edificios. El auge en la demanda está justificado por los excelentes resultados que ha venido ofreciendo en las rehabilitaciones en las que se ha empleado y es por ello que arquitectos, constructores y promotores empiezan a emplearlo en las nuevas edificaciones.
Abordar adecuadamente la envolvente térmica tanto en edificios nuevos como en rehabilitaciones para mejorar su aislamiento y evitar o solucionar puentes térmicos es la intervención que mejores resultados ofrece en conjunto con la instalación de carpinterías de altas prestaciones. Siendo una media muy eficaz para conseguir un gran ahorro energético, y por tanto económico, reduciendo la demanda de energía necesaria para cubrir los sistemas de calefacción y refrigeración.
El aumento en la demanda ha propiciado que desde distintos organismos se estén elaborando normas para armonizar los requisitos exigibles a los disantos sistemas SATE.
Las exigencias del DB-HE en los valores de transmitancia térmica aplicadas a las fachadas se resuelven en la gran mayoría de situaciones con la instalación de un sistema de aislamiento térmico exterior, los distintos aislamientos, que veremos más adelante, poseen unos valores λ muy reducidos que sumado a los espesores empleados aportan una gran resistencia térmica. Estos sistemas también están diseñados para evitar el paso de agua, cumpliendo así con la prevención de agua o humedad dentro de las edificaciones, según dicta el DB-HS-1 y evitando condensaciones, intersticiales y superficiales.
Cuando hablamos de SATE, a pesar de estar compuesto por distintas capas y materiales, nos referimos al conjunto, o kit, suministrado por una misma marca en el cual todos los materiales deben estar ensayados de manera conjunta, ofreciendo unos resultados y características de funcionamiento del sistema suministrado.
Podríamos separar la composición de SATE en tres grandes grupos:
Poliestireno expandido (EPS)
Es la solución más conocida y empleada. La gran mayoría de los sistemas SATE que se ejecutan en Europa son con este material, incluso en España es el que con una gran diferencia más se emplea. Ofrece una gran relación entre aislamiento y precio, siendo prácticamente el material más competitivo en este aspecto.
Los paneles de espuma de Poliestireno expandido han de cumplir con los requerimientos de la UNE-EN 13163:2013 y tener el marcado CE. Para fijarlos es necesario el empleo de un mortero adhesivo compatible y la instalación de anclajes mecánicos.
Es un material que garantiza un buen espesor y a la vez es muy manejable, facilitando la instalación gracias a su bajo peso. Al ser un producto hidrófugo previene la entrada de agua y la aparición de humedades, así como las condensaciones.
Poliestireno expandido grafito (EPS-G)
Es un tipo de aislamiento que está en plena expansión en el mercado, en su composición y características externas es muy similar al EPS, pero se utilizan placas de poliestireno expandido con grafito que aumentan considerablemente el aislamiento que ofrecen. Con los mismos espesores que un EPS se consiguen mejores resultados aislantes, es el material que mayor capacidad aislante ofrece.
Poliestireno extruido (XPS)
Se trata de una espuma rígida compuesta de gas (5%) y poliestireno (95%). Es un sistema en características muy similar a los anteriores, debe llevar el correspondiente marcado CE, cumpliendo con las exigencias de UNE-EN 13164:2013+A1:2015.
Este sistema suele venir machihembrado y posee una mejor conductividad que el expandido (EPS), permitiendo igualar prestaciones de aislamiento al EPS con espesores menores, pero por debajo de la que ofrece el EPS-G.
Al ser un material más denso su resistencia a la humedad es mayor, favoreciendo su instalación en las partes inferiores de la fachada, dónde se pueden dar mayores problemas de humedades a consecuencia de la capilaridad. También por sus mejores prestaciones de resistencia mecánicas es adecuado para su instalación en los zócalos de los edificios.
Es el único material que mantiene sus propiedades cuando está mojado.
Lana mineral (MW)
El material empleado para la confección de estos paneles es la lana de roca, proveniente de rocas volcánicas. Uno de los puntos críticos en la instalación de paneles de lana mineral es el de conseguir una planeidad adecuada debido a su composición.
La norma que rige el marcado CE que deben llevar los paneles de lana de roca es la UNE-EN 13162:2013+A1:2015.
Como aislante térmico posee unas propiedades similares a las del EPS. Sin embargo, la lana mineral posee una estructura multidireccional que le permite albergar aire estático en su interior facilitando la disipación de energía sonora, ampliando su uso al acondicionamiento acústico.
Al ser un material no combustible, clasificado como A1, también se utiliza como protección pasiva contra el fuego, manteniendo sus propiedades mecánicas por encima de los 1000ºC.
Tableros de fibra de madera (WF)
La norma europea que evalúa las características de los tableros de fibra de madera para otorgarles el marcado CE es la UNE-EN 13171:2013+A1:2015.
Son tableros muy solicitados por su marcado carácter ecológico, gracias a la porosidad que poseen las fibras de madera que lo componen se evita el efecto pared fría, regulando la humedad interior gracias a la gran difusión de vapor. Poseen una gran resistencia acústica, tanto a las ondas sonoras como al ruido por impacto
Tableros de corcho (ICB)
A pesar del carácter más natural de estas planchas deben igualmente poseer el correspondiente marcado CE, regido por la norma UNE-EN 13170:2013+A1:2015.
Ofrecen buenos valores térmicos y acústicos, a la vez que ofrecen alta resistencia a la carga y gracias a sus propiedades elásticas pueden absorber las dilataciones de los elementos en contacto.
Cabe destacar los excelentes resultados que ofrecen evitando condensaciones y humedades, cumpliendo con los requerimientos al fuego que se exigen a un elemento constructivo para fachada.
Podemos clasificar los elementos de fijación en 2 grandes grupos, los morteros con propiedades adhesivos que realizan la unión entre el aislante y el paramento vertical de fijación y los mecánicos, para asegurar estos mismos aislantes o para anclarlos correctamente a las esquinas y los arranques.
Morteros de fijación
Son morteros hidráulicos que varían en su composición en función del tipo de aislante que se va a emplear y el tipo de paramento vertical al que se debe adherir.
Anclajes mecánicos
Se utilizan de manera complementaria al motero adhesivo para asegurar que las placas queden firmemente ancladas al paramento.
Hay una gran variedad en el mercado, lo más común es que sean de fibra de vidrio reforzadas con poliamida y estas pueden anclarse mediante un sistema de roscado o de percusión.
Perfiles
Los más comunes son los perfiles de arranque, suelen ser de aluminio o PVC y se emplean para iniciar la hilada del aislamiento. Quiero destacar que son un elemento delicado a la hora de evitar puentes térmicos, es importante estudiar su colocación y su situación y evaluar los materiales a los que se ancla y los que van a estar en contacto con él.
Hay una gran variedad de perfiles en el mercado, los ya mencionados de arranque, para esquinas, para rincones, arranques circulares, conectores a perfil de arranque, laterales….
Otros elementos del sistema
He querido hacer un apartado que englobe una serie de elementos menores que no quería pasar por alto como son las juntas de dilatación, goterones, perfiles de despiece, masillas epoxi para sellados o los distintas tapas que se ofrecen para rellenar las fijaciones mecánicas y no interrumpir el aislamiento y conseguir una planeidad perfecta.
Inmediatamente después del aislamiento todos los sistemas SATE comparten su estructura:
En entradas posteriores entraremos en detalles más concretos como la unión con el terreno del sistema SATE, las subvenciones que se están otorgando hoy en día para su instalación…